La tacaña araña Doña Caña
A la tacaña araña Doña Caña
le gusta contar sus hazañas
a las otras arañas.
Un día contó,
la tacaña araña Doña Caña,
que, mientras iba al paso,
se encontró un zumo de pestaña
que estaba metido en un vaso,
y enterito se lo bebió.
¡De repente se le pusieron
las orejas gigantes!
¡Parecía una rata extravagante!
Eso le pasa a la tacaña araña Doña Caña
por ser tan tacaña.
Juan Moral
1 comentario:
Genial Juan. Enhorabuena
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